Por Nicolás Sará Rivero
En el Estadio Ester Roa Rebolledo se midieron Cruzados y chillanejos en una nueva edición de la SuperCopa. El elenco santiaguino se adjudicó su lugar como el actual monarca del futbol chileno, mientras que Ñublense aseguró su presencia como campeón de la Primera B.
Tras una primera mitad reñida y disputada, fueron los sureños quienes pegaron primero en la segunda mitad. Federico Mateos (69’) aprovechó una rápida transición de su equipo que finalizó el volante con un certero remate.
Sólo minutos más tarde, una mano en el área hizo a Fernando Zampedri (78’) establecer la paridad vía lanzamiento penal.
Con el partido finalizado todo se definió en los lanzamientos penales.
Desde los 12 pasos Sebastián Pérez y Nicola Pérez detuvieron los primeros lanzamientos (Federico Mateos y Diego Buonanote respectivamente). Finalmente, el portero cruzado logró detener un nuevo disparo y Diego Valencia terminó por sentenciar un nuevo torneo para Universidad Católica.
Los Cruzados levantaron su cuarta SuperCopa y la tercera consecutiva. Además, lograron su título oficial número 28 y superaron a Universidad de Chile como el segundo elenco con más campeonatos, sólo detrás de Colo – Colo.