Ya consumada la final de Copa América, con un decepcionante rendimiento de la selección chilena, es momento de voltear las esperanzas nacionales en Universidad Católica, único equipo chileno que continúa compitiendo a nivel internacional.
Recordemos aquí que Universidad Católica terminó segunda en el grupo F detrás de un sorprendente Argentinos Juniors y se convirtió en el segundo peor de los clasificados con 9 puntos y Diferencia de Gol de 0 (Olimpia terminó con -1).
Y delante tiene a nadie más ni menos que a Palmeiras, el actual campeón de Copa Libertadores, equipo que lideró el grupo F superando a Defensa y Justicia (único equipo contra el cual perdió) por 6 puntos y terminando con la mejor diferencia de gol del torneo (+15), además de ser el cuadro más goleador con 20. En sus filas cuenta con Rony, uno de los goleadores del torneo con 6 tantos.
Como si esto fuese poco, en el plano local o verdao, desde quedisputó su último encuentro por la fase de grupos de Copa Libertadores (6×0 a Universitario), ha acumulado 13 encuentros más y se encuentra cursando una racha inmaculada de buenos resultados con 5 triunfos consecutivos en el brasileirao que lo tiene encumbrado en la primera posición de la liga local tras 11 fechas.
Católica por su parte ha disputado solo 6 encuentros oficiales desde entonces y viene de ser eliminado de Copa Chile en condición de local ante Everton de Viña del Mar, aún no pudiendo consolidarse como un equipo sólido desde la llegada de Gustavo Poyet. Como si esto no fuese suficiente, pierde a su arquero titular indiscutido para este encuentro al ser transferido a Celta de Vigo.
Campeón actual de la Copa Libertadores, lejos el equipo más goleador de la presente edición, líder del actual brasileirao, el rival de U. Católica de este jueves por octavos de final es cosa mucho más que seria. En otras palabras, el monstruo viste de verde.
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Créditos imagen: Goal