El partido de este miércoles sería histórico independiente del resultado: el equipo ganador jugaría por primera vez una final. Australia llegó a esta instancia tras eliminar en cuartos de final a Francia, mientras que Inglaterra -actual campeón de Europa- hizo lo propio con Colombia, repitiendo su clasificación a semifinales de 2015 y de 2019.
Finalmente fueron las inglesas las que sacaron boletos para la final, tras derrotar por 3-1 a las Matildas frente a 75.784 espectadores. Por el contrario, Australia jugará por el tercer lugar con Suecia.
Las locales salieron con todo al campo de juego. Es más, la goleadora y estrella australiana, Sam Kerr, jugó desde el arranque por primera vez en la competencia.
La primera mitad fue de ida y vuelta, con las Matildas teniendo algunos problemas para mantener la posesión del balón y las leonas proponiendo pero con copa profundidad. En medio de un juego trabajo y físico, las inglesas dejaron en silencio a la hinchada australiana en el minuto 36, luego de una gran jugada que terminó con un remate de derecha de Ella Tone en el ángulo izquierdo del arco defendido por Arnold.
En el segundo tiempo Australia salió con un nuevo aire y con la obligación de dar vuelta el partido. Cuando más la necesitaban, Sam Kerr sacó toda su potencia y en el minuto 63 puso la paridad con un derechazo imposible para la portera inglesa Mary Earps.
Pero siete minutos después y, tras un error en la defensa rival, Inglaterra tomó nuevamente la delantera en el electrónico con anotación de la goleadora inglesa, Lauren Hemp. A cinco minutos del final del tiempo reglamentario las leonas terminaron con cualquier aspiración australiana con gol de Alessia Russo.
FINAL: Inglaterra enfrentará a España el próximo domingo 20 de agosto en el Estadio Australia en Sydney.
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