En la precordillera suenan conocidos nombres para reforzar algunos puestos.
Si bien es cierto que el presidente de Cruzados, Juan Tagle, ha asegurado que está “satisfecho” con el actual plantel del bicampeón, no se ha cerrado a la idea de sumar otro refuerzo para robustecer una zona donde durante el último tiempo ha sufrido constantes bajas: el mediocampo.
Durante la presentación del delantero Gastón Lezcano, Tagle aseguró que “la verdad es que por ahora estamos trabajando intensamente en el tema de Edson Puch (ver nota), con eso el tema del plantel debiera quedar cerrado, pero siempre hay espacio si se presenta una oportunidad interesante, o si a la vez sale algún jugador”.
Y agregó “en esto del fútbol siempre hay situaciones que se presentan de maneras inesperadas y que pueden llevar a modificaciones. En un principio este sería efectivamente el plantel”
Por su parte el gerente deportivo de la UC, José María Buljubasich, indicó que el plantel del primer equipo está diseñado de forma muy similar al del 2019, y que esto se condice porque “la forma de jugar de Ariel Holan, en un principio, sería similar a la de Gustavo Quinteros”.
Ante esto, el “Tati” reconoció que “uno nunca sabe las sensaciones que van pasando en estos días, en los partidos amistosos, como se va viendo el equipo. Si en algún momento consideramos que en otra posición es necesario hacer un movimiento de traer a algún jugador, se evaluará, pero no como estaba la necesidad que estaba de traer a un centrodelantero, la necesidad de como trajimos a Gastón, la necesidad de traer a un central más por la lesión de Germán Lanaro o lo que hablamos de la continuidad de Edson«, concluyó.
Volver a casa
Sin embargo, y ante la posible partida a préstamo del volante Carlos Lobos a Everton de Viña del Mar, en razón de las negociaciones entre el Pachuca y Cruzados por Edson Puch, Cruzados buscaría suplir ese puesto con un jugador formado en casa: Claudio Sepúlveda.
El jugador de 27 años juega desde 2015 en Huachipato donde ha jugado 62 partidos y ha anotado ocho goles. No obstante, la piedra de tope sería la cláusula de salida del mediocampista donde la UC tendría que desembolsar 500 mil dólares. Y si bien es cierto el entorno cercano del jugador no ha desmentido ninguna información, lo cierto es que el sueño del jugador formado en la precordillera es volver a casa.